lunes, 30 de enero de 2012

EL JUEGO DE LA PATATA DE HERNÁN CORTÉS

Bien, todos sabemos que una de las claves para la conquista del imperio azteca por parte de Hernán Cortes fue la información que tuvo referente a los pueblos que conformaban este imperio. Para poder conseguir información, puesto que la barrera idiomática era casi total, Cortés se valió de dos intérpretes. Por un lado de la célebre Malinche o Doña Marina, amante de Cortés y por otro lado de Jerónimo de Aguilar.
Jerónimo de Aguilar llevaba ocho años viviendo entre los indios a raíz de un naufragio, cuando Cortés descubrió su presencia y lo hizo llamar para que tradujese del maya al español mientras que la conocida como La Malinche, traducía del náhuatl al maya. Mediante esa doble traducción, Cortés pudo conocer muchos datos de etnias que convivían dentro del imperio azteca así como mantener conversaciones con Monctezuma.

Indicar, por otro lado, que a parte de Jerónimo de Aguilar, también sobrevivió a aquel naufragio, Gonzalo Guerrero que no sólo no decidió dejar el Cozumel donde se encontraba y había formado una familia, sino que incluso llegó a emprender la guerra contra los españoles cuando estos entraron la zona de Cozumel.

Por otro lado indicar que Malinche, llegó a significar "traición" para su pueblo.

EL NOMBRE DE AMÉRICA

Todos sabemos que el nombre de América, el continente viene del célebre italiano Américo Vespuccio, pero no fue exactamente porque él se empeñase sino más bien como algo fruto de la casualidad o como decimos a día hoy, a raíz de estar en el momento adecuado en el lugar adecuado.
Bien, Américo estuvo de viaje por el nuevo continente y tuvo la brillante idea de escribirle una carta muy descriptiva a su amigo Soderini en 1504. Bien, esta carta llegó hasta el monasterio de Saint Die, en Francia, donde un célebre cartógrafo, Martín Waldseemuller, estaba reeditando la geografía de Ptolomeo. Emocionados con el relato de Américo, decidieron traducir la carta y copiarla al final de la introducción a esta geografía. Añadieron también que el nombre adecuado para este nuevo lugar era América, en honor a su nuevo descubridor: Américo Vespuccio.
El caso es que esta nueva edición de la Geografía de Ptolomeo fue todo un éxito, algo así como un best seller en su época. El 1507, año de su publicación se reeditó 7 veces algo que sucedió de nuevo en 1508 y 1515 ayudando en la difusión del nuevo nombre de América.


sábado, 28 de enero de 2012

¿SE ACABA EL MUNDO EN 2012?


Mucho se ha leído estos días en internet sobre el hecho de que el mundo se acaba el 21 de diciembre de 2012 según lo recopilado por el calendario maya. Bien, no sé hasta que punto esas conjeturas pueden ser ciertas pero sí os contaré que las profecías aztecas e incas han sido muy claras (o no) en el pasado.
Supongo que a todo el mundo le sonará Hernán Cortés, ese español, que en torno al 1519 decidió ir a conquistar el imperio Azteca, ubicado en torno a lo que hoy consideraríamos México y que por aquel momento tenía al frente una figura tan importante como Monctezuma. A raíz de una profecía, Monctezuma confundió a Cortés como descendiente o enviado Quetzalcoatl, uno de los dioses más importantes de los aztecas, quién según la leyenda volvería para reconstruir su ciudad, algo que se interpretaba como el final del imperio azteca. Es más, según las fuentes, esos datos coincidían con el reinado de Monctezuma y durante algunos años previos a la llegada de Cortés una serie de fenómenos naturales parecía confirmarlos: eclipses, terremotos, etc...
En la conquista de Perú, Pizarro se benefició de algo similar ya que según la profecía de Viracocha, dios creador y uno de los de más categoría del panteón inca, durante el reinado del XII inca llegarían unos hombres por mar que destruirían el imperio. No podía ser más clara. Se cumplió.
NOTA:
-Los mayas son diferentes a los incas y los aztecas (ver mapa).
-La concepción del tiempo en el calendario maya es diferente a la nuestra. Para empezar su idea del tiempo es cíclica. Tiene un principio y un final que enlazan. Hay varias formas de medir su tiempo:  el ciclo sagrado o Tzolkin (20 meses de 13 días), el solar o Haab (18 meses de 20 días más uno de sólo 5); el siglo Maya (empezaba cuando el inicio de ambos coincidía el mismo día) y la Cuenta Larga. (que contaba el número de días transcurridos desde la creación (5.125 años). Bien, pues es este último. Debido a su estructura temporal tenían la necesidad de ponerle un punto y final a las cosas. A nosotros esos no nos hace falta, nuestro tiempo es lineal
-Por otro lado, tanto la profecía azteca como la inca se confundieron: ni Pizarro ni Cortés eran dioses, ni semidioses, ni enviados de los dioses. Eran unos señores que por ciertos motivos se vieron obligados a cruzar el Atlántico para ver que se podía conquistar por allí.